Las mejoras realizadas por la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible en la herramienta de adhesión al Sistema Andaluz de Compensación de Emisiones (SACE) han impulsado notablemente la incorporación de nuevas entidades a esta iniciativa y han contribuido a que durante el primer trimestre de 2022 se hayan inscrito 37 nuevas huellas de carbono. Este incremento supone casi el doble (+95%) del experimentado durante el mismo período de 2021 y eleva los datos globales el registro del SACE a 199 huellas de carbono de 131 organizaciones diferentes.
La consejera Carmen Crespo ha resaltado que “la gestión, digitalización y simplificación administrativa el SACE están siendo claves para impulsar esta herramienta a la que esperamos que se incorporen cada día más firmas de la Comunidad Autónoma para sumarse a la Revolución Verde que ha impulsado el presidente Juanma Moreno”.
Atendiendo al número de inscripciones, destacan las 70 huellas de carbono de empresas del sector de la construcción, que suponen el 35% de las adhesiones de los tres primeros meses de 2022. A estas firmas les siguen el sector servicios (29%), las entidades gestoras de agua y residuos (8%), la industria manufacturera (7%) y la hostelería (3%), entre otras.
La responsable de Desarrollo Sostenible ha resaltado “la implicación de la sociedad andaluza con la conservación del medio ambiente y la lucha contra el cambio climático, ámbitos en los que también se está volcando el actual Gobierno autonómico”. “Desde la Junta predicamos con el ejemplo”, ha recalcado Crespo, recordando que su consejería es “la primera de España en calcular la huella de carbono de todas sus sedes”. “Esta iniciativa posiciona a Andalucía a la vanguardia del país y deja patente la apuesta del Ejecutivo andaluz por contribuir en todo lo posible a la conservación del planeta”, ha añadido.
Asimismo, la consejera ha apuntado que desde la Junta se están “dando importantes pasos en el ámbito de la gestión y la legislación logrando, entre otros hitos, la aprobación del dictamen de la Ley de Economía Circular de Andalucía (LECA) en comisión parlamentaria”. Al respecto, ha aseverado que, “una vez superado este trámite, ya estamos cerca de convertirnos en la región más circular de Europa”.
Sistema voluntario
El SACE es un marco voluntario a través del cual las empresas, instituciones y administraciones adheridas asumen el compromiso de realizar con una periodicidad anual una auditoría de emisiones de gases de efecto invernadero, diseñar un plan de reducción y presentar un informe de cumplimiento de los objetivos del este plan. Este sistema se creó en 2018 junto al registro de la huella de carbono, que recoge los esfuerzos que realizan las organizaciones para calcular y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero que genera su actividad. Además, les abre la posibilidad de compensar toda o parte de su huella de carbono a través de los métodos oficialmente establecidos.
Con la puesta en marcha del SACE y su registro autonómico, la Administración andaluza avanzaba en la gestión e implementación de medidas contra el cambio climático pero, como ha explicado Carmen Crespo, “la complejidad para inscribirse era un obstáculo y la Dirección General de Calidad Ambiental y Cambio Climático puso en marcha en 2020 una serie de novedades encaminadas a modernizar la herramienta”. “El objetivo principal era facilitar la participación del tejido empresarial, las instituciones y las administraciones de Andalucía en la lucha contra el cambio climático, y parece que lo estamos consiguiendo”, ha comentado la consejera.
A lo largo de 2020 y 2021, Desarrollo Sostenible ha ido incorporando novedades en el Sistema Andaluz de Compensación de Emisiones que, entre otras cuestiones, mejoran la coordinación con el registro de huella de carbono del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. De esta forma, todas las entidades que se inscriben en el SACE quedan también automáticamente registradas a nivel nacional.
